lunes, 29 de junio de 2009

La presidenta Cristina Fernández ofreció esta tarde una conferencia de prensa en el Salón Sur de Casa Rosada. Allí analizó el resultado de las elecciones legislativas que tuvieron lugar ayer en todo el país y abordó otros temas.
La jefa de Estado destacó que el acto eleccionario "se ha dado en un marco de tranquilidad y transparencia total". "Digo esto porque previo al acto eleccionario había mucha crónica, mucha publicación acerca de problemas de mesas, de transparencias, de posibilidades de fraude... Lo cierto es que, afortunadamente, como hace muchos años en la República Argentina, las elecciones se dieron en un marco de transparencia absoluta", señaló Cristina Fernández. También destacó la puntualidad con la que el Ministerio del Interior dio a conocer los cómputos y saludó especialmente a quienes resultaron ganadores en cada uno de los distritos del país.
Por otra parte, destacó que a nivel país el oficialismo recibió el apoyo del 31,03 por ciento de los votantes, lo que sigue posicionando al sector como el de mayor cantidad de adherentes de la República. Para la Presidenta, de la lectura de estas elecciones se puede inferir que el país se acerca "a una suerte de tripartidismo" similar "al modelo europeo". Destacó además que "es la primera vez desde el avenimiento de la democracia en el segundo turno electoral de un gobierno no se produce una derrota" del partido oficial en todo el país. La Jefa de Estado aclaró que este análisis no pretendió "minimizar ni ocultar" la derrota del oficialismo en la provincia de Buenos Aires.
Asimismo, remarcó la excelente elección que realizó el candidato del Proyecto Sur, Fernando Solanas, en el distrito Capital, y destacó que desde su sector se reclama una mayor profundización del modelo de rescate del rol del Estado y redistribución de la riqueza.
La Presidenta también analizó la manera en que quedará compuesto el Parlamento a partir del 10 de diciembre. En este sentido, señaló que el oficialismo retendrá 34 senadores de los 37 que tiene en la actualidad, mientras que los posibles aliados pasan de 4 a 6. Y en Diputados, se pasa de los 115 propios y 22 aliados, a 107 y 27, respectivamente. Y, en otro orden, sostuvo que no están previstos cambios en el gabinete nacional, salvo la ya anunciada renuncia de la ministra de Salud, Graciela Ocaña.
Luego fue consultada por periodistas sobre varias cuestiones de actualidad, entre las que se destacan:
La situación del INDEC: Criticó que los medios consideren válidos los datos difundidos por el Instituto sólo cuando éstos son negativos.
La situación monetaria: Negó enfáticamente que el gobierno estudie devaluar el peso. Y recordó que la moneda argentina fue la que menor devaluación tuvo sufrió en la región frente al impacto de la crisis internacional de los mercados financieros.
La negociación con los Holdouts: Sostuvo que no es posible entablar negociaciones en un escenario tan volátil.
La cuestión salarial y jubilatoria: "En 25 años de democracia, nunca se hizo tanto en material salarial y jubilatoria como este gobierno", recordó la Mandataria.
Por otra parte, Cristina Fernández manifestó su apoyo al destituido presidente de Honduras, Manuel Zelaya, y abogó por la pronta restitución del proceso democrático en ese país.

domingo, 28 de junio de 2009

Cristina repudió el golpe de Estado en Honduras y llamó a exigir la restitución del presidente Zelaya


La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, sostuvo que el Golpe de Estado concretado hoy en Honduras por los militares y la detención del presidente de ese país, Miguel Zelaya, es "un hecho que nos remonta a la peor barbarie de nuestra historia política”."Estoy en contacto con mi Canciller (Jorge Taiana) que a su vez está en contacto con los cancilleres de los demás países americanos, para que se reclame ante la OEA que se respete la carta democrática de ese organismo”, señaló la presidenta.Cristina comentó que "la canciller hondureña relataba lo que fue el Golpe de Estado y la responsabilidad de un importante grupo mediático en la concreción del golpe, también escuché de otros dirigentes que habían cortado la luz y no dejaban propagar lo que había pasado”."Según contaron otros dirigentes, Zelaya relató que fue sacado casi sin ropas por las fuerzas armadas, que lo golpearon.Estamos en un momento muy sombrío que nos recuerda a los peores momentos de los países latinoamericanos”, manifestó la mandataria.Insistió en que "vamos a impulsar una reunión de Unasur, aunque Honduras no forma parte de ese organismo, y vamos a exigir a la OEA el respeto de la institucionalidad y la reposición de Zelaya, además garantías para su vida, su integridad física y la de su familia, porque eso es fundamental, porque es un acto de respeto a la democracia y a todos los ciudadanos”."Los que tenemos algunos años sabemos lo que esto significa, un retorno a la barbarie, todos los países del continente deben exigir la restitución del gobierno democrático”, remarcó Cristina.Explicó que "primero instruí al canciller para que se contacte con los cancilleres. Es muy importante sobre todo en un día como hoy donde los ciudadanos estamos ejerciendo el derecho democrático que es la manera en que debe comportarse la sociedad”.La presidenta votó esta mañana en la escuela 39, mesa 37 de la ciudad de Río Gallegos.

viernes, 26 de junio de 2009

Emotivo encuentro entre Cristina y Jorge Rivas en Olivos

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner mantuvo hoy un largo encuentro con el diputado nacional socialista Jorge Rivas, luego de que el ex vicejefe de Gabinete sufriera un brutal ataque que lo alejó de la función pública en noviembre de 2007."Fue un encuentro muy emotivo”, dijo el secretario de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete, Oscar González, y también dijo a Télam que "la presidenta lo abrazó en reiteradas oportunidades”.Del encuentro en la quinta presidencial de Olivos participaron además el ex presidente Néstor Kirchner, el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli y el dirigente socialista Ariel Basteiro.En la hora veinte que duró la reunión, la presidenta le preguntó al diputado Rivas por su familia, sus planes políticos y la tecnología que utiliza para comunicarse luego del asalto que le produjo la parálisis de casi todo su cuerpo y la pérdida del habla.Poco después de la agresión, Fernández de Kirchner visitó a Rivas en el Instituto Fleni de Belgrano y en aquella oportunidad le transmitió su apoyo y solidaridad, sin saber si el socialista bonaerense podía escucharla."Jorge le dijo que la escuchaba y que le agradecía sus palabras, fue un momento muy emotivo”, relató González, padrino político de Rivas dentro del socialismo.El episodio que cambió radicalmente la vida de Rivas ocurrió el 13 de noviembre de 2007, de madrugada, cuando paró con su vehículo en la farmacia situada en la esquina de Hipólito Yrigoyen y Oliden, en Lomas de Zamora, y para robarle le aplicaron una fortísima trompada.El domingo, Rivas irá a votar en Temperley, asistido por un acompañante.

jueves, 25 de junio de 2009

Cristina inauguró una fábrica de alimentos en Santiago.


La presidenta Cristina Fernández de Kirchner cuestionó ayer en Santiago del Estero las propuestas estatistas del candidato de Unión-PRO Francisco de Narváez y afirmó que "es muy difícil discutir si cambian de blanco a negro en siete días". "Dicen que no escuchamos pero no es así, siempre escuchamos" afirmó, recordando que la oposición acusaba al gobierno de estatizador y "hoy, en el importante matutino al que (Néstor) Kirchner siempre le pregunta qué le pasa, vemos que el candidato dice exactamente lo contrario de lo dicho la semana anterior". "Se trata de temas estratégicos y definitivos para la Argentina, y así le restan total seriedad a cualquier discusión o debate", agregó. Cristina consideró que "así como un gobierno tiene responsabilidades, también hay una oposición que debe ser responsable y coherente, con planteos sensatos, con previsibilidad, que permitan un diálogo fructífero para la sociedad". La presidenta visitó por la tarde la localidad santiagueña de La Banda, donde inauguró la nueva planta de la firma alimenticia NutriSantiago en el Parque Industrial de la ciudad, además de otros establecimientos. Acompañada por el gobernador Gerardo Zamora y la ministra de la Producción Débora Gorgi, Cristina fue recibida por miles de santiagueños, clamor que incluso demoró la agenda prevista por los organizadores de la visita.

martes, 23 de junio de 2009

Cristina inauguró una Central Termoeléctrica en Marcos Paz


Con una inversión de u$s 80 millones, la unidad está compuesta por una turbina a gas a ciclo abierto con una potencia de 165 MW. Esta generadora, ubicada en la ruta 3, kilómetro 49,5 en la localidad bonaerense de Marcos Paz, provincia de Buenos Aires, se conectará al Sistema Argentino de Interconexión a través de las líneas existentes de 500 kV con la estación transformadora Ezeiza, denominada nodo de referencia del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM). Así, la empresa busca garantizar la entrega de la potencia comprometida con sus clientes. Petrobras informó que la nueva central eléctrica le permitirá generar un aumento de la oferta eléctrica, colaborar en la mejora de la calidad de abastecimiento energético y contribuir a la estabilidad del sistema eléctrico nacional. Con la entrada en operación de la Central Termoeléctrica Genelba, la capacidad generadora de Petrobras aumentará a 1.104 MW.

Cristina inauguró un astillero en Campana.


“Este es el astillero más moderno y especializado de América Latina para la construcción en serie de barcazas, fue diseñado con una capacidad de fabricación de 1 barcaza cada 5 días, con esta infraestructura podremos cubrir mas del 70 % de la demanda prevista en los próximos años en la Hidrovía Parana-Paraguay”, anunció Horacio Tettamanti, presidente de la empresa.

Para los que no creen, aquí están estas son.


Para los que no creen, aquí están, 710 escuelas construidas, otro record para el gobierno más exitoso de los últimos 200 años de historia.
Para el que le gustan las estadísticas sería algo así como una escuela nueva cada 3 días.


lunes, 22 de junio de 2009

"No se va a dar un paso atrás en la necesidad de seguir construyendo un país justo"


La jefa de Estado encabezó la ceremonia de inauguración de obras de remodelación del hotel del gremio ferroviario La Fraternidad, en el salón del hotel Juan Domingo Perón, ubicado en el barrio del Congreso.Durante su discurso, Cristina Fernández celebró que "los trabajadores organizados se sientan representados" por su gobierno "Trabajadores son los que deben ir todos los días, cualquiera sea su ingreso, a cumplir tareas en relación de dependencia", afirmó la Presidenta.La jefa de Estado sugirió a quienes "tal vez por prejuicios culturales se sienten alejados de los sindicatos y de los trabajadores" que recuerden "cómo le fue a cada trabajador cada vez que le fue mal al resto de los trabajadores" y sentenció: "Se terminaron cayendo todos indefectiblemente"También, la Presidenta señaló que "Defender el modelo nacional no es defender a un sector o a un partido. Es un voto en defensa propia, en defensa de conquistas logradas, en defensa del trabajo recuperado"Además, la mandataria afirmó que "el trabajo, la producción y la defensa del trabajo nacional son los grandes baluartes para seguir creciendo". Y aseguró que defender un modelo nacional es "un voto en defensa propia, de las conquistas logradas". Durante el acto, la jefa de Estado se comprometió a seguir luchando para defender ese modelo nacional que se basa en la "redistribución del ingreso y la igualdad de oportunidades para todos para construir una Argentina más justa, equitativa e igualitaria". En este marco, la Presidenta recordó "las industrias y los trabajos recuperados, los aumentos otorgados a los jubilados y los millones de ciudadanos que pudieron jubilarse" gracias a las facilidades otorgadas desde el Estado.

En otro tramo de su discurso, la mandataria pidió tener "memoria" a los empresarios respecto a cuál era su situación en 2003 y afirmó que "no se va a dar un paso atrás en la necesidad de seguir construyendo un país justo"."No sólo los trabajadores fueron los beneficiarios, también nuestros empresarios. Por eso reclamamos a todos memoria, que se acuerden como estaban en 2001 o en 2003, a dónde exportaban, con qué valores, cuanto valían sus campos, sus fábricas".Además, la Presidenta señaló que "no se va a dar un paso atrás en la necesidad de seguir construyendo un país justo" y recalcó que su gobierno puede "exhibir hechos y resultados concretos en estos 6 años y obras como nunca se habían visto durante décadas"

sábado, 20 de junio de 2009

Cristina celebró el día de la bandera entregando los primeros créditos otorgados por el Banco Hipotecario con fondos de la ANSES


La presidenta encabezó el acto en el Banco Hipotecario donde se entregaron las primeras escrituras de créditos otorgados con fondos de la Anses. Cristina Fernández convocó "en este Día de la Bandera a un esfuerzo colectivo para poder seguir construyendo y avanzando".
"A poco menos de un año del bicentenario, los argentinos tenemos que mirar hacia atrás, no para reprocharnos cosas, pero si para saber por qué nos pasaron determinadas cosas que permitieron que un país que había logrado por la década del '50 ser la primera economía de Latinoamérica, llegamos a lo que llegamos en el 2001", reflexionó.
Llamó "simplemente a reflexionar, para pensar, para decidir que es hora de profundizar esta transformación, este cambio convocando a todos. La clave debe ser entender que es imposible que a los gobiernos le vaya mal y a la sociedades les vaya bien".
"Necesitamos de todos, pero también la convicción profunda de poner los intereses del conjunto por sobre los intereses individuales o de un sector", enfatizó, al hablar en el acto en el que estuvo acompañada por la ministra de la Producción, Débora Giorgi; el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli; el titular de la Anses, Amado Boudou y el presidente del Banco Hipotecario, Diego Bossio.
Para la Presidenta este acto, "tiene que ver con recuperar las ilusiones, la fe, las ganas de que un país diferente lo podemos construir entre todos".
Recordó que "por ley un 0,5 de los fondos (de los jubilados) debían haber estado volcados a la construcción de viviendas, si esto se hubiera hecho podríamos haber construido 500 mil viviendas que hubieran sido medio millón de argentinos con soluciones habitacionales".
"La decisión del gobierno de adelantar los planes 2010 y 2011 de manera tal que esos 37 mil créditos que teníamos pensados se adelanten tiene que ver con la convicción y la comprensión que nosotros tenemos acerca de cuál debe ser el rol del Estado a la hora de apuntalar la actividad económica y la generación del empleo", enfatizó.
En el caso del Banco Hipotecario, la Presidenta destacó "como se articula lo público y lo privado, pero con una clara direccionalidad que no sea solamente asegurar rentabilidad económica sino también social, porque una alimenta a la otra".
"Una rentabilidad económica que no llega a la sociedad tiene poco sustento en el tiempo, es necesario que el conjunto de la sociedad también pueda disfrutar de ese crecimiento que es el que hemos protagonizado en estos seis años", señaló.

jueves, 18 de junio de 2009

Cristina inauguró trenes urbanos en Salta, Chaco, Córdoba, Tucumán y Lincoln (Província de Bs. As.)


"Estamos restaurando el daño producido en perjuicio del tejido social" Asi lo dijo la presidenta Cristina en la presentación del tren urbano en Salta y mediante una teleconferencia dio el "campanazo" de partida de nuevos trenes en Chaco, Tucumán, Córdoba y Buenos Aires.







Cristina inauguró la represa Hidroeléctrica "Los Caracoles" y el Complejo Hospitalario Rawson en San Juan.

Dijo Cristina:

"No son obras eléctricas únicamente, y como en la Argentina durante mucho tiempo, demasiado para mi gusto, hubo gobiernos que pensaron que no era necesario producir, que no era necesario trabajar, desde algunos que montaron propagandas donde una silla que era argentina se rompía y las sillas que eran extranjeras eran buenas. Una vez conté esta anécdota en Alemania. Se imaginan, les conté a los alemanes que había habido un gobierno en la Argentina que ponía un montón de sillas en un spot publicitario y que las que eran construidas por obreros argentinos se rompían y las que eran extranjeras eran buenas. Cuando les contaba esto a los alemanes, me miraban sin entender, eso sería casi criminal hacerlo en cualquier otra nación desarrollada del mundo, sin embargo, esto sucedió. Y luego vinieron otros gobiernos que no eran dictatoriales como ese, que habían sido elegidos por el voto popular, no sé si por incapacidad, por distintas ideas, por subordinación cultural a otros modelos, creyeron que también podíamos ser un país de servicios o un país de servicios financieros. Yo nunca creí en eso, porque soy hija de trabajadores y pude llegar a la universidad, porque hubo argentinos que construyeron fábricas, hubo argentinos que se les ocurrió construir aviones, autos, dedicarse a la energía nuclear, a las grandes empresas hidroeléctricas, a generar energía, en fin, hubo otros argentinos que creyeron en su país y en sus compatriotas. Y creo que lo que hoy estamos haciendo aquí como lo que ayer hice en Atucha, es eso, una reafirmación de nuestra identidad, una reafirmación de nuestras propias capacidades como argentinos, como técnicos, profesionales, obreros, empresarios, es un creer en nosotros mismos y saber además que las cosas que nosotros no hagamos por nosotros, nadie, absolutamente nadie, las va a venir a hacer.
Por eso, tengan la certeza que hoy no es solamente un acto de inauguración. Hoy, ustedes, han construido también un acto de patriotismo."

miércoles, 17 de junio de 2009

Cierre del Núcleo del Reactor Nuclear de Atucha II


Dijo Cristina:
"Hoy le hemos puesto la tapa a ese modelo que durante tantos años condenó a la desocupación y al atraso de los argentinos; 5.200 trabajadores vienen desde distintas partes del Conurbano, de aquí de Lima también, de Zárate, en fin, de todos lados para contribuir al crecimiento y para diversificar nuestra matriz energética.
Me decía el titular de la empresa que para cargar diariamente este reactor, necesita una carga de uranio que entra en el baúl de una camioneta. En cambio, si fuera una turbina de carbón, necesitaríamos 12 millones de kilos diarios para poderla hacer funcionar. Esto significa la importancia de seguir incorporando a nuestra matriz energética la energía nuclear. Y tenemos que ir por más, tenemos que ir por Atucha III y por el CAREM. Atucha III en donde tendremos que seguir incorporando tecnología extranjera. Pero créanme, mi gran ilusión, mi gran sueño es que con el CAREM podamos producir el Reactor Nuclear Argentino y creo sinceramente que lo podemos hacer, porque somos en Latinoamérica los que mayores experiencias tenemos en esta materia.
Pero además de dar trabajo a cientos de argentinos, a miles de argentinos, además de generar energía por más de 690 megavatios e incorporar tecnología, estamos modelando un país diferente, argentinos y argentinas; un país donde el trabajo, la producción, la recuperación de la dignidad son los ejes fundamentales que hemos puesto en marcha el 25 de mayo del año 2003.
Hay algunos que quieren volver al pasado y andan diciendo por ahí que volverían a reprivatizar Aerolíneas Argentinas o volverían a dar las jubilaciones al sector privado. Son los que sueñan con el viejo modelo de los años ´90. ¡Claro! Tal vez obtuvieron muchas rentabilidades y muchas ganancias durante esos años, años en que los argentinos quedaban sin trabajo, sin posibilidades de progreso, de estudio, de vivir una vida diferente.
Pero aquí estamos, pusimos la obra en marcha contra todos los escépticos, contra los que no creían, porque tenemos la voluntad y la convicción de construir un país diferente. Y hoy cuando vi a esos hombres y a esa ingeniera de mamelucos blancos que se abrazaban cuando calibraban la tapa que finalmente sellaba ese reactor, sentí que estábamos en el sendero y en el camino correcto del que no nos vamos a apartar, porque estamos convencidos que ese es el camino definitivo de la Argentina.
Por eso, hoy me siento muy orgullosa, no de ser Presidenta, sino de ser argentina, porque hemos vuelto a recuperar la confianza en nosotros mismos, en que somos capaces de vencer los desafíos que se nos ponen adelante, este era un desafío, una obra paralizada durante tantos años y la pusimos en marcha. Estamos ya cumpliendo casi el 95 por ciento de la parte civil y casi el 60 por ciento de la parte electromecánica, y la vamos a finalizar en los plazos convenidos para poder empezar lo otro, y seguir incorporando energía porque vamos a tener más de la que hoy producimos, porque vamos a seguir generando crecimiento y vamos a completar, como ya lo hicimos, el crecimiento más importante de nuestros 200 años de historia.
Ayer ponía en marcha mediante la firma del respectivo decreto, la ley de Promoción de Inversiones. Quiero contarles algo, el año pasado, en el año 2008, batimos un récord histórico. Las empresas argentinas invirtieron 10,1 del Producto Bruto Interno en compra de maquinarias, de hierros para producir; una cifra que no se había alcanzado desde la finalización de la segunda guerra mundial; hierros para producir y generar trabajo para los argentinos. Fue también el año de crecimiento más importante de nuestras exportaciones, de nuestro superávit comercial. Fue también el año más importante en materia de inversión de nuestro Producto Bruto Interno, 23 puntos porcentuales y tenemos que ir por más, porque fue demasiado el tiempo en que no crecíamos en producción, fue demasiado el tiempo en que abandonamos el desafío de la innovación tecnológica, de la investigación, de la producción, fue demasiado el tiempo que perdimos.
Ahora necesitamos recuperarlo redoblando esfuerzos y aunando voluntades. Por eso yo desde aquí, desde esta obra símbolo de la recuperación de la Argentina, desde esta Atucha II convoco a todos los argentinos a seguir en la senda del crecimiento, del trabajo, de la producción, de las convicciones, de que un modelo de país es posible."

lunes, 15 de junio de 2009

Cristina fue ovacionada en la OIT


La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró hoy que su visita a Ginebra, donde expuso ante la Organización del Trabajo (OIT), "fue muy positiva" y sostuvo que pese al poco tiempo que estuvo la actividad cumplida fue "sumamente provechosa". La presidenta hizo declaraciones a los periodistas que cubren su visita a Ginebra, donde hoy realizó una fuerte defensa del modelo puesto en marcha en la Argentina desde 2003 y reclamó la presencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en las futuras reuniones del Grupo de los 20 (G-20). Cristina Fernández de Kirchner realizó previamente una fuerte defensa del modelo puesto en marcha en la Argentina desde 2003 y reclamó la presencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en las futuras reuniones del Grupo de los 20 (G-20)."Es imprescindible que la OIT, que es donde están representados los trabajadores y los empresarios, formen parte de las deliberaciones del G-20 porque son los trabajadores y la defensa de los puestos de trabajo las claves para superar esta crisis desatada ante el derrumbe del mundo de la especulación financiera", dijo Cristina ante el plenario de la OIT en el Palacio de las Naciones, en Ginebra.En su discurso la Presidenta explicó ante los sindicalistas y funcionarios de la OIT las claves del modelo iniciado en la Argentina en 2003, al que calificó "más como un modelo político, que económico" y dijo que "se basa en la defensa del nivel de empleo y de la actividad económica y la producción para superar la actual crisis"."En la última reunión del G-20 tuvimos junto con el presidente de Brasil, el presidente Lula, una fuerte discusión con el G-20 cuando se intentó poner en el texto de la declaración final un capítulo destinado a la flexibilización laboral y recuerdo que dijimos que si aparecía eso en el texto nosotros nos retirábamos del organismo", recordó Cristina.De inmediato, indicó que "en la Argentina si alguien me hubiera dicho que como presidenta iba a darle un préstamo a una multinacional norteamericana que, además, casi en la misma semana era estatizada por el primer presidente afroamericano de Estados Unidos, realmente uno diría que se trataba de un delirio total", al aludir al auxilio del gobierno a la empresa General Motors de su planta de General Alvear, en Rosario.Cristina dijo que "esta anécdota refleja en exacta dimensión el cambio que vive el mundo que hoy vivimos y como ha encontrado a la Argentina que el año pasado, 2008, ha completado el ciclo de crecimiento económico más importante de sus últimos 200 años de historia".En ese marco, la Presidenta explicó que "en nuestro modelo el patrón de crecimiento económico desde el 2003 se basó en el trabajo y la producción contra la especulación financiera".Cristina recordó que "en estos seis años la Argentina, que partió con un 25 por ciento de desocupación en el 2003 y apenas 9 mil millones de dólares de reservas en el Banco Central, hoy tiene un 7,3 de desocupación, más de 46 mil millones de dólares de reservas".Ante los representantes del mundo del trabajo, la Presidenta dijo también que "hoy en la Argentina tenemos mas de 1.500 convenios de negociaciones colectivas en marcha y llegamos a que un 43,6 por ciento del PBI participan los trabajadores y estamos cerca de nuestra meta que es el 50 y 50, o el fifty-fifty".Cristina resaltó también la política del gobierno sobre la defensa del trabajo registrado y recordó que "una de las decisiones más importantes de estos últimos años en la Argentina fue la de retomar para el estado los recursos de los trabajadores a partir del manejo de los fondos previsionales".En ese sentido, criticó la privatización de ese sistema "del que gozaban unas pocas empresas que se hacían ricas y lo sufrían todos los argentinos porque lo que se recaudaba tampoco volvía en obras para los argentinos".Cristina señaló que en la Argentina desde 2003 se hizo también una fuerte política de desendeudamiento y precisó que "hace seis años la deuda era del 156 por ciento del PBI y hoy ronda el 49 por ciento de un PBI, que es casi 300 mil millones de dólares superior al de ese entonces, a partir de la apuesta a consolidar un mercado interno fuerte"."Esto, más muchas otras decisiones nos han permitido a los argentinos enfrentar a la globalización de la mejor manera, exportando sus productos con valor agregado que significa generar trabajo para nuestros compatriotas", destacó.Recordó asimismo que se batieron récords de exportaciones en 2008 con 71 mil millones de dólares y subrayó la decisión de la creación de un plan de obra pública y de infraestructura destinado a viviendas, hospitales, caminos y escuelas."Ahí lo veo a Gerardo Martínez, de la UOCRA, actividad que en el 2003 tenia 50 mil cotizantes y hoy llega a medio millón de cotizantes, lo que habla de la importancia de esa decisión de crear obra publica como garantía de empleo", señaló Cristina al aludir a la presencia del líder de los trabajadores de la construcción, presente en la asamblea de la OIT.Al reiterar decisiones adoptadas para enfrentar la crisis económica, Cristina relató ante la OIT la creación de un comité integrado por los ministerios de Trabajo y de la Producción, la AFIP y la ANSES, que "nos permite avanzar en las medidas estructurales y saber como están los trabajadores, el nivel de actividad y además salir en auxilio de alguna empresa que lo necesite o trabajar fuertemente en el programa de empresas recuperadas", explicó.La Presidenta hizo hincapié en que "nuestro modelo hace de la preservación del vínculo laboral una de sus claves principales" y señaló que "lo más valioso es que al trabajador no le llegue el telegrama de despido"."Cuando uno escucha que este año, solamente este año, se han destruido 50 millones de puestos de trabajo, se da cuenta de la necesidad de seguir generando políticas para que eso no ocurra porque de ahí dependen no solo la vida laboral de ese trabajador sino de toda una sociedad, de todo un país", dijo en referencia a la crisis mundial.Cristina subrayó que "en la Argentina en este primer trimestre la desocupación no ha crecido por el robusto mercado interno" y señaló que "eso lo hemos logrado a partir de políticas que apuntaron a mantener la producción y el trabajo con valor agregado".Por último la Presidenta reiteró que "estamos ante la necesidad de que el estado asuma un rol mucho más activo" y recordó que "esta gran crisis se produjo precisamente porque el estado estuvo ausente y no controló a los bancos ni a las capitalizadoras, ni al capital financiero que se terminó autodestruyendo y destruyó a la economía real".

sábado, 13 de junio de 2009

Amantes del ajuste

Por Alfredo Zaiat

El concepto de ajuste es uno de los más arraigados en el discurso del pensamiento económico convencional. Parte de la idea de que el mercado define un equilibrio perfecto entre las principales variables. Afirma que la alteración de ese sendero virtuoso requiere entonces de correcciones permanentes para acercarse a ese estadio óptimo de funcionamiento de la economía. Ya se ha probado a lo largo de la historia de la humanidad que la felicidad absoluta no existe. Del mismo modo, también ha quedado demostrado que esa armonía suprema de la economía es una quimera. Sin embargo, la ortodoxia y no pocos heterodoxos, que incluso critican esa visión neoclásica, convalidan esa noción al convertir el ajuste como rector de la política económica. Si el ajuste pasa a ocupar la centralidad de una estrategia es porque se piensa que la economía puede alcanzar equilibrios permanentes. Sin embargo, la realidad es un poco más compleja que los modelos y las identidades básicas que ofrece la ciencia económica. Estas resultan un interesante aporte para ordenar el entendimiento de fenómenos complejos, pero transformarlas en dogmas es una característica distintiva de los amantes del ajuste. Como la economía tiene una tendencia al desequilibrio puesto que es un rasgo distintivo de su propia dinámica, el ajuste es la recomendación insistente de esa corriente de economistas. No están en condiciones de proponer otra vía que no sea la del ajuste porque están en búsqueda de una conciliación general de las variables, aunque se sabe que no existe. Por eso reiteran una y otra vez acerca de la necesidad del ajuste. Su insistencia tiene el respaldo teórico que construye una concepción ideal de la economía, que ha provocado una profunda distorsión en la comprensión y posterior manejo de los problemas que enfrenta esa ciencia. El pensamiento dominante se abraza al fundamentalismo del modelo equilibrio-ajuste, pero en el área de la economía se expresan intereses enfrentados de sectores sociales y que tienen su manifestación en pujas políticas. Si se excluyen esos factores, el esquema lineal del ajuste queda convalidado y para ello no debe haber conflictos sociales ni reclamos sectoriales ni el universo de la política.
En estos días de pasión electoral se presenta una vocación impúdica por el ajuste por parte de los economistas del establish-ment, adelantando lo que ellos consideran el inevitable desenlace del día después. También es cierto que acompañan esa idea algunos heterodoxos y grupos técnicos que habitan despachos oficiales. Los primeros, además de la militancia por las recetas del fracaso en beneficio de unos pocos, pueden utilizar esa herramienta discursiva como estrategia para captar votos. Pero los segundos han quedado atrapados en esa lógica autodestructiva. En algunos círculos del progresismo existe una apropiación selectiva de la agenda de cambio, donde el fácil discurso acerca de mejorar la distribución del ingreso viene acompañado por las advertencias sobre la necesidad de prudencia fiscal.
La ortodoxia defiende y pretende aplicar las tradicionales políticas contractivas encaminadas a reducir el gasto público, restringir el crédito y la liquidez, y presionar para que se concrete una reducción generalizada de los salarios. Axel Kicillof señala en Fundamentos de la Teoría General. Las consecuencias teóricas de Lord Keynes que “tanto en un contexto de inflación como de alta desocupación, la contracción es la panacea de la ortodoxia, porque supone que cuando el mercado actúa por sí mismo es infalible; de modo que la respuesta consiste en evitar toda intromisión en sus mecanismos”. En referencia a otro momento histórico, pero que se hace presente en el actual debate sobre el sendero futuro de la economía local, Kicillof destaca que “Keynes, en cambio, consideraba que todos estos intentos ortodoxos estaban, en el fondo, dirigidos a restaurar las condiciones económicas del pasado, haciendo caso omiso a las transformaciones recientes”. Y agrega, como si estuviera participando de las polémicas de estos días, que “para Keynes, por el contrario, la renovada capacidad del Estado para intervenir en la economía no debe tomarse como una malformación ni como una desgracia, sino que es uno de los productos genuinos e irreversibles del proceso de transformación económica”.
La corriente heterodoxa tiene el desafío de eludir el vicio ortodoxo del ajuste y reconvertirlo en una lógica de la expansión para no afectar los ingresos de los sectores vulnerables de la sociedad. La idea sencilla que ha pasado a ser un activo del sentido común es que ante las crisis se requiere apretar los cinturones. Fajas que son elegidas por los conservadores entre los grupos sociales más frágiles. En esa corriente se encienden entonces luces de alerta ante la merma del superávit fiscal, como si ese menor excedente fuera un síntoma de debilidad. Ese tipo de evaluación está contaminado por la concepción neoliberal de la economía. Ante la extraordinaria crisis internacional que ha impactado a nivel doméstico, aunque con menor intensidad que en otros países, se requiere de una estrategia de expansión descartando la del ajuste. La disminución del superávit fiscal es una medida prudente y compensadora para amortiguar los efectos negativos de la desaceleración de la actividad. Se trata de una política anticíclica, como reclaman economistas de vertientes diversas. Sin embargo, la reducción de ese superávit ha sido presentada por la ortodoxia como un factor preocupante y perturbador de la estabilidad. Incluso representantes de la administración kirchnerista han realizado esfuerzos mayúsculos para mostrar que las cuentas públicas siguen manteniendo superávit robustos.
Dentro de los estrechos márgenes de autonomía que ofrece una economía periférica, con traumáticos antecedentes de crisis recurrentes y aun con compromisos de deuda abultados, en un escenario con escaso acceso al crédito internacional, el superávit es una herramienta de política económica que busca ampliar esos estrictos límites. De todos modos, en períodos de transición para enfrentar coletazos de la crisis global y con considerables reservas en el Banco Central, la obsesión por preservar el superávit fiscal resulta tributaria a la concepción del ajuste. Por el contrario, la noción de expansión apunta a constituir un círculo virtuoso de crecimiento y en consecuencia de mayores ingresos que permiten justamente consolidar la solvencia fiscal. De ese modo se abre la posibilidad de ampliar los espacios de autonomía de la política económica.
El temor que algunos economistas heterodoxos les tienen a las críticas del pensamiento convencional no les permite romper con la hegemonía de la economía ortodoxa. Es cierto que el poder junto a sus voceros de la city, acompañados con entusiasmo por la cadena nacional de medios privados, resulta asfixiante. Pero, en realidad, quienes deberían estar con escasa capacidad respiratoria son los amantes del ajuste. Su pócima ya fue probada con desastrosos efectos sobre la mayoría, y a la vez se ha derrumbado su paradigma neoliberal con la caída del Muro de Wall Street. Dejar que la crisis y las vías para enfrentarla sean explicadas por los mismos que provocaron semejante desastre económico global sería un pecado de elevado costo para el pensamiento progresista. Para ello, además de pasar a ocupar el centro del escenario con convicciones firmes, se requiere apostar por la política de la expansión enterrando la idea del ajuste.

viernes, 12 de junio de 2009

"No somos genios, no somos iluminados, simplemente somos argentinos convencidos de que lo mejor que tenemos es el pueblo"


PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ, DURANTE SU VISITA A LA COOPERATIVA DE TRABAJO "LOS CONSTITUYENTES", EN VILLA MARTELLI, PARTIDO DE VICENTE LÒPEZ, EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES.

..." quiero, en esta tarde de encuentros, en este lugar de trabajo, en el taller de una fábrica, terminar mi intervención de hoy con historias de vida porque la economía suelen ser cifras, datos duros, pero detrás de esos números se esconden tragedias, vidas, dramas cotidianos.
...la historia que cuando llegué me contaron y que se parece mucho a la historia de la Argentina de estos últimos seis años, la historia de Luís, que debe andar por ahí.
Luís era un obrero de esta fábrica, de esta cooperativa "Los Constituyentes", y fue despedido en el año 2001. Allí sus compañeros después se quedaron en la fábrica y comenzaron toda la tarea y lo volvieron a encontrar a Luís, en el año 2004, en la calle -me contaba él-, una noche de lluvia, era cartonero y lo trajeron de vuelta aquí, a la fábrica.
Hoy Luís es obrero orgulloso de esta fábrica, ha podido comprar su casita, tiene su auto y mantiene a su familia. Es la historia de millones de argentinos la de Luís.
Hay millones de Luises en la República Argentina que habían quedado a la vera del camino y que estos años de crecimiento, de trabajo y de producción, permitieron que vuelvan a tener la dignidad que tiene que tener todo ser humano.
Además de Luís, hay millones también de hombres y mujeres que pudieron jubilarse porque este Gobierno impulsó cubrir a aquellos que habían quedado fuera porque no habían aportado, por despido o por patrones inescrupulosos. Ellos también son Luises, Luises que habían quedado a la vera, los Luises que solamente iban al colegio para comer y no para estudiar; los Luises que habían perdido la posibilidad de tener una beca para poder acceder a la universidad.
Es la historia de nosotros y hemos sido nosotros mismos, los argentinos, que, con esperanza, con ilusión, con trabajo, con esfuerzo y con confianza en nosotros mismos, hemos revertido.
Por eso, hoy aquí no estamos solamente en una fábrica recuperada, estamos en una Argentina recuperada por los argentinos y para los argentinos."

"Yo me comprometo como Presidenta de todos los argentinos, como siempre lo he hecho toda mi vida, siendo legisladora quedando muchas veces en soledad con planteos que me decían que los decía porque era opositora porque eran cosas imposibles de realizar, me quedo con la defensa irrestricta de esas ideas que pudimos llevar a la práctica.
No somos genios, no somos iluminados, simplemente somos argentinos convencidos de que lo mejor que tenemos es el pueblo y que es posible desarrollar un proyecto nacional y popular aún en un mundo global. "

jueves, 11 de junio de 2009

Claro que si!


Hoy Cristina pronunció un discurso de los que tanto me gustan, cargado de emotividad, de pasión, de compromiso, un discurso bien peronista.

"Y no me voy a cansar de decirlo, una y mil veces: quiero ser la Presidenta que construya igualdad de oportunidades para todos los argentinos, quiero ser la Presidenta que defienda el trabajo nacional, que se abran más fábricas, que tengamos más y mejor trabajo, que tengamos más escuelas, más viviendas y eso se logra únicamente teniendo como objetivo la construcción de una gestión basada en los hechos, pero en los hechos que lleguen a todos, y sobre todo a los que más lo necesitan.
A mí no me sorprenden estas más de 20 cuadras llenas de gente, tampoco me sorprendieron las columnas que vi, que todavía estaban llegando. Me hizo acordar esa marcha con banderas argentinas, una marcha prolija, organizada, de hombres y mujeres jóvenes y no tan jóvenes también, que se acercara ahora, aquí. No creo que me tengan que agradecer nada, yo no quiero, porque yo no he dado nada, yo solamente he cumplido con una obligación, ustedes no vienen a agradecer, vienen aquí porque más que agradecidos son un pueblo esclarecido de cuál es el camino y el sendero que tenemos que seguir.
Yo quiero desde aquí, desde el corazón del pueblo convocar a todos los argentinos a poder continuar este crecimiento económico impensable seis años atrás, a poder seguir sosteniendo en un mundo que se derrumba, nuestra actividad económica y nuestro nivel de empleo.
Sabemos que la crisis internacional va a pasar y sabemos también que tenemos que estar preparados para redoblar el esfuerzo para que ese crecimiento inédito que hemos tenido en estos seis años de gobierno, lo renovemos y vayamos aún por más. Necesitamos veinte años más de crecimiento sostenido para volver a ser ese país que alguna vez fuimos allá en la década de los '50: la economía más importante de toda Latinoamérica.
Estoy convencida de que lo vamos a lograr porque estamos en el camino, porque hemos comprendido que el proyecto es de producción y de trabajo, porque sabemos que tenemos que agregar más valor a nuestros productos, porque tenemos que defender la industria nacional que es defender también el trabajo nacional. Y lo vamos a seguir haciendo con el mismo compromiso con que lo hemos hecho en estos seis años.
Déjenme decirles, finalmente, que estoy muy contenta de que hayan venido con esas hermosas banderas argentinas y que tienen el color que nos hermana a todos, la celeste y blanca, esa que miles de trabajadores empuñaron para ir a buscar hace muchos años a un líder que los había interpretado y los había representado.
De eso se trata, en definitiva, el lugar que quiero tener en la historia si es que la historia me da algún lugar, el de haber sido una de ustedes y el de haberlos representado siempre, cueste lo que cueste y me cueste lo que me cueste.

Quiero decirles, finalmente, que no es fácil, son muchos los intereses, son muchos y poderosos, también cuesta un poco más cuando uno tiene el pelo largo y se pinta. Pero no importa, no van a poder como no pudieron con ninguna de ustedes. Tenemos la fortaleza que nos da el ser dadoras de vida, tenemos la fortaleza de haber aguantado tal vez las cosas que el compañero no aguanta porque los hombres tienen otro orgullo y están formados de otra manera.
Pero aquí estamos nosotras con la fortaleza que nos da ser el centro de la familia, ser la cabeza del hogar, la que apechuga y la que afronta, ustedes lo saben, no es distinto en la Casa Rosada, es lo mismo.
Tenemos que colocarnos, entonces, al frente de las dificultades y de las adversidades para seguir creciendo y trabajando con el ejemplo de ustedes, con el ejemplo de mujeres que con un pañuelo blanco enfrentaron a la dictadura, es lo que me da la fortaleza para seguir adelante en este proyecto de construcción de una patria más justa, más equitativa, con igualdad de oportunidades."

Vicepresidente en trance abusivo.

Por Orlando Barone

Ahí está Julio Cleto Cobos el probo. Ahí está en la soledad del poder, resistiendo, conjurando, conspirando, husmeando, fisgoneando.Ambicionando, fantaseando. Tramando. Vicepresidente en “desejercicio” ejecutivo , y en ejercicio oblicuo y de soslayo. Cada día más se consagra en ese papel increíble e insólito: el de ser el opositor más cercano y más carnal del gobierno que comparte e integra. Y desintegra. No hay adversario, enemigo, atacante, negador y opositor a la presidenta y a cuanto ella hace o proyecta, que él no reciba trajeadito y modoso en su despacho; en cómplices tardes de té susurrantes y agrarias; ganaderas, rurales y gauchas sin gauchos. Si el opositor es un sospechoso de la justicia más lo hospeda en su recinto legal llevado al límite de no parecerlo. Si trae consigo una desmesura leguleya para posar damnificado, más consuelo y alianza le dispensa. Qué no se hablará en contra de la socia y superior jerárquica en esos secreteos y conciliábulos. Qué festín se harían, si lo escucharan o supieran, los magazines de la televisión de la tarde ante tanta imperfección de la condición humana. Julio Cleto Cobos ha logrado reproducir en miniatura histórica la leyenda del caballo de Troya pero en tono de farsa. Ya que esta desvaída intriga desciende de un caballito de plomo en miniatura, del cual salen a la noche, no gladiadores griegos sino fantasmas de deseo destituyente pero de acción fallida. Lo que Julio Cleto hizo lo hizo, y hay que reconocérselo: su voto no positivo fue pacificador. Pacificó a los favorecidos no positivos, infundiéndoles aunque sea el virus del escrache y la agresión. Ya que no les puede infundir el don de la sincera aceptación democrática porque a la democracia los “no positivos” la intoleran. La maltragan. Acaso el extraordinario mérito del excelentísimo señor vicepresidente de Cristina Fernández sea el de haber probado- proponiéndose aviesamente lo contrario- la consistencia del Estado y la resistencia de la mujer que él defrauda sabiéndose protegido por un poroto magno. Bendito papel, modelo de leal militancia, el del ser el inapropiado y feliz anfitrión de los opositores. Este es un elogio a Julio Cleto Cobos.
Carta abierta leída el 11 de Junio del 2009 en Radio del Plata

lunes, 8 de junio de 2009

Hacemos

Cristina acordó que los partidos de la Selección nacional del Fútbol disputados en el marco del Mundial del Fútbol Sudáfrica 2010 y sus eliminatorias sean televisados por el Sistema Nacional del Medios Públicos, para todos los argentino.




Y luego, encabezó el acto por el cual fueron entregadas nuevas aeronaves para la operación de la empresa Aerolíneas Argentinas.
Y más tarde, Cristina dio por inaugurada una nueva planta de agua potable para Formosa en un acto en el que también firmó acuerdos para el desarrollo tecnológico, agropecuario y turístico de la provincia.
Esto se llama gestión de gobierno, se entiende entoces por que decimos, "nosotros hacemos".

Hebe y Moria




Por la genial Sandra Russo



Escribí hace poco tiempo que Moria Casán ya dejó de camuflar bajo sus mentadas transgresiones para exhibirse como una mujer de derecha. No descubrí la pólvora, ella lo dice públicamente. Pero la gente de la televisión tiene un fantasma tremendo: dejar de estar en televisión. Uno de los recursos para mantener “vigencia” es hacer escandaletes, para que Jorge Rial o similares les den pantalla. Estos días, Moria Casán protagonizó una de las escenas más obscenas que se han visto, fingiendo –encima espantosamente– un orgasmo después de basurear y humillar a Hebe de Bonafini, cuya fotografía habla en el programa de Pettinato.
Quedará eso de Moria Casán: una vedette entrada en años y en lucha abierta y feroz contra su propia vejez, escupiendo a una mujer que pasará a la historia, como todas las Madres y Abuelas. Pasarán años, siglos, y si este planeta sigue en su órbita nuevos argentinitos aprenderán en la escuela que hubo una vez un gobierno surgido de un golpe de Estado, que secuestró y asesinó a una generación de opositores políticos. Los niños verán luego, quién sabe en qué tipo de pantalla, imágenes de mujeres con el pañuelo blanco en la cabeza. Y sabrán que hubo unos años en los que todo este país, incluidos los grandes diarios y las radios, siguió viviendo como si en la otra cuadra nunca hubiera habido una frenada y disparos, como si el compañero de la oficina o la profesora de música o el almacenero o el abogado o el estudiante que todo el mundo conoció nunca hubiesen desaparecido. Leerán en sus libros de texto, los nuevos argentinitos, que cuando todas las puertas se habían cerrado, incluso las de muchos amigos, esas mujeres fueros las primeras que gritaron. Y que nunca pidieron venganza, y que decían la verdad cuando pedían justicia, porque era eso lo que pedían: que se juzgara a quienes habían matado a sus hijos y nunca lo confesaron. Nunca. Porque los niños deberán entender que un desaparecido, y fueron 30 mil, es entre otras cosas un muerto que nunca se deja de llorar.
Las Madres y las Abuelas han sido lo mejor de nosotros, en el único conjunto posible en la Argentina. Un nosotros que no admita que ellas son el símbolo de lo mejor que tenemos, que es su dolor, su lucha y su reclamo de justicia, el gesto más civilizado, más elaborado de todos los que nos ofrece nuestra historia reciente, plagada de violencia y desprecio por la vida.
De Moria Casán se perderán las fotos y las películas. Poco a poco el tiempo irá enterrando la imagen y el recuerdo de una mujer que tuvo una playa en Mar del Plata donde otras mujeres tomaban sol en tetas.

sábado, 6 de junio de 2009

Burguesía fallida

Por Alfredo Zaiat
En el ámbito de las ciencias políticas ha pasado a ser habitual el concepto Estado fallido. Esta idea impulsada por académicos y think tank estadounidenses de corrientes ideológicas diversas considera, entre otros aspectos, que esos Estados no pueden brindar adecuadamente los servicios básicos a la población y, por lo tanto, pierden legitimidad política en un contexto de creciente violencia social. Noam Chomsky en su libro Estados fallidos interpela al pensamiento convencional que incorporó en esa categoría a países de la periferia, destacándose en la región los casos de México y Colombia, y muestra cómo Estados Unidos comparte rasgos de Estados fallidos. Chomsky sostienen que éstos son aquellos que carecen de capacidad o voluntad para proteger a sus ciudadanos de la violencia y quizás, incluso, de la destrucción y se consideran más allá del alcance del derecho interno e internacional. Afirma, además, que padecen de un grave déficit democrático que priva a sus instituciones de su auténtica misión. El análisis económico tiene la posibilidad de apropiarse de esa idea para tratar de comprender situaciones domésticas que el discurso dominante presenta con naturalidad. Por caso, el conflicto abierto entre el gobierno de Venezuela y el Grupo Techint que ha provocado la reacción del establishment local y trasnacionalizado. Las críticas al proceso político y económico de Hugo Chávez, su engañosa extensión a la realidad doméstica y la presión con claque opositor para debilitar el Mercosur expulsando a Venezuela ha sido la manifestación más contundente de la existencia en Argentina de una “burguesía fallida”.
Los argumentos para aislar a Venezuela refieren a que el objetivo planteado por Chávez de transformar a ese país en una economía socialista anticipa su alejamiento del carácter de “economía de mercado”. Por ese motivo no debería formar parte del Mercosur, sostienen las principales cámaras patronales, actuando de vocero de esa posición el secretario de la UIA, José Ignacio de Mendiguren, el mismo que como ministro de Producción del gobierno de Eduardo Duhalde impulsó la pesificación asimétrica, provocando una transferencia millonaria de recursos a los grupos económicos, entre ellos Techint. Esa anacrónica reacción empresaria envuelta en una supuesta defensa de intereses nacionales, cuando al mismo tiempo decenas de pymes y no pocas grandes están expandiendo sus negocios en el marco de acuerdos de integración regional con Venezuela, ha quedado descolocada. En esa misma semana, la Organización de los Estados Americanos (OEA), con el acuerdo de los 34 cancilleres de los países miembros, enterró la resolución que hace 47 años expulsó a Cuba de esa organización por haber asumido la ideología marxista-leninista y aliarse al bloque soviético. En ese contexto latinoamericano, plantear la expulsión de Venezuela del Mercosur se presenta fuera de época. Además, pese a la existencia de conflictos sobre la propiedad de grandes empresas entre el gobierno de Chávez con otros países integrantes del bloque en ningún caso sus respectivas cámaras patronales exigieron con semejante intoxicación ideológica el desplazamiento de Venezuela del Mercosur.
Esa avanzada, además de la defensa corporativa del Grupo Techint, tiene el objetivo de limitar la intervención del Estado en la economía. En especial, el poder está inquieto por la designación de directores y síndicos en empresas que la Anses detenta paquetes de acciones relevantes. El análisis tosco sobre la “chavización” de la administración kirchnerista no tiene otros elementos que lo sustenten que anteojeras ideológicas o intereses ocultos. En esa instancia, con esos comportamientos se hace presente en toda su dimensión el concepto de “burguesía fallida” para la economía argentina.
En una economía capitalista la burguesía desempeña un papel central, y en términos históricos fue revolucionaria al desplazar el régimen feudal. Pero también lo ha sido en el desarrollo de las fuerzas productivas con innovaciones e inversiones que fueron alterando el sistema de producción y el orden social, expandiendo sus fronteras hasta lugares remotos del planeta. Es abundante la literatura acerca del comportamiento y características de las clases dominantes. La de Argentina actúa como cualquier otra que busca maximizar ganancias y su acción no está determinada por razones “culturales”, vinculadas con corrientes inmigratorias o creencias religiosas, como sostienen ciertos especialistas. Pero lo cierto es que los grandes industriales son parte importante del fracaso del desarrollo económico local a pesar de contar con el apoyo de gobiernos de distinto origen. A pesar de recibir amplios y diversos beneficios fiscales y financieros no pudieron ser un agente dinámico de un modelo de acumulación competitivo.
Un sendero a transitar para tratar de comprender ese comportamiento remite a evaluar a esos industriales como un sector rentista. Esta característica tuvo una espontánea manifestación con la venta al mejor postor de sus empresas en los últimos veinte años, para girar parte de esos fondos al exterior y otra para volcarlos a la compra de campos y a la producción agropecuaria. Esto impulsa a considerar que la existencia de una “burguesía fallida” está asociada a un modelo de desarrollo latifundista, con rentas extraordinarias obtenidas por las ventajas comparativas a nivel internacional del campo argentino, que terminó conformando una clase dominante periférica y dependiente. Esto explicaría la vocación por la especulación financiera, la imposibilidad de constituir una base industrial medianamente desarrollada pese a los millonarios subsidios otorgados por el Estado y la tendencia a reorientar excedentes a la compra de campos y a la actividad agropecuaria.
El economista Andrés López escribió el documento Empresas, instituciones y desarrollo económico: un análisis general con reflexiones para el caso argentino, publicado en el Boletín Techint (Nº 320, mayo-agosto 2006), que es muy ilustrativo para acercarse a la complejidad de la burguesía nacional. López sostiene que “el estudio de la conducta empresaria es clave para entender mejor el funcionamiento de los mercados y la dinámica de la competencia, sino que también es central para comprender los diferentes estilos y alcances de los procesos de desarrollo económico a nivel nacional”. Describe en forma esquemática que investigadores de izquierda y liberales cuestionan, con distintas bases conceptuales arribando a la misma conclusión, el comportamiento de la burguesía local. Los primeros destacan que debido a su carácter rentístico o especulativo no fue capaz de liderar un proceso de acumulación basado en la innovación y la inversión en capital físico y humano. Por el contrario, se limitó a aprovechar las oportunidades que se presentaba en cada una de las fases de la economía en distintos momentos de la historia reciente. Hoy, por ejemplo, ya explotó el ciclo de elevado crecimiento que permitió la megadevaluación y pesificación, socializando pérdidas a costa del resto de la sociedad, y busca ahora una vía rápida de ajuste para sostener su comportamiento especulativo. Por su parte, la corriente liberal sostiene que la existencia de conductas empresarias que denomina “lobbista” o “de captura de rentas” no tiene que ver con características intrínsecas de la burguesía local, sino de políticas económicas erróneas, cuyo origen se ubica en el régimen mercado-internista surgido tras la crisis del ‘30 y consolidado a partir de los gobiernos peronistas.
Ambos enfoques, sostiene López, se unifican en la profunda desconfianza que tienen hacia toda forma de vinculación entre el Estado y la clase empresaria, “ya que cuando esa interacción existe usualmente es para generar beneficios hacia un sector limitado de la sociedad (gobernantes y empresarios poderosos) a costa del resto”. Para los liberales, esa interacción es “a priori sospechosa de ser el resultado o el prolegómeno de algún acto de corrupción o una transferencia de renta”, señala López, para agregar que la corriente de pensamiento de izquierda considera que “es la consecuencia del sometimiento del Estado a las necesidades del gran capital”. En la Argentina, la historia muestra evidencias de ambos tipos de conductas que ante intentos de construir institucionalidad a partir del Estado impulsando un proceso de acumulación sostenido, esa “burguesía fallida” ha buscado frustrarlo para mantener inalterado ese funcionamiento de la economía que le permite una acumulación especulativa de capital. Incluso cuando una facción de esa burguesía intenta apartarse de ese destino es señalada por los propios abanderados de la libertad del capital como cercana al gobierno de turno o marginada de los círculos del poder económico.
En general, todo proceso de industrialización implicó una fuerte transferencia de recursos públicos hacia la naciente burguesía. “La evidencia muestra que la corrupción ha estado presente, en mayor o menor medida, en casi todas las experiencias de industrialización y desarrollo económico modernas”, explica López. Pero destaca a la vez que esos países (Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Alemania, Japón, Corea, entre otros) han alcanzado una estructura institucional que ha impulsado que esa burguesía no se ha quedado en la captura de rentas o en conductas rentísticas, para reconvertirse en una con estrategias competitivas, dinámicas, de expansión, actuando como un factor de estabilidad económica y no de perturbación. No ha sido el caso de “burguesía fallida” de la experiencia argentina.

viernes, 5 de junio de 2009

"Aprendimos que la construcción colectiva necesita del esfuerzo de todos los argentinos"


Palabras de la Presidenta en la presentación de candidatas a legisladoras FPV, City Bell.
"Yo vengo, recién con Daniel, de un acto muy importante, en una localidad emblemática, en el origen de nuestro nacimiento político, como fue la localidad de Berisso. De allí salieron miles y miles, un 17 de octubre, para cruzar los puentes de la capital y cambiar definitivamente la historia de los argentinos. Pero no lo hicieron con el puño cerrado, ni crispado, no lo hicieron insultando y agraviando, iban cantando - las crónicas históricas lo relatan minuciosamente- iban alegres, cantando, con sus ropas de trabajo, recién salidos de las fábricas y los talleres, donde habían recuperado parte de los derechos, que nunca se les habían reconocido, y fueron con alegrías, sin odios, a liberar al hombre con el que habían identificado su destino colectivo. Y tal vez, me atrevo a decir que ese sea el segundo gran aporte de nuestro espacio político a la historia de los argentinos, es decir, incorporamos la igualdad de género e incorporamos también la revolución y el cambio en paz, sin sangre entre hermanos, construyendo colectivamente.
La historia de la humanidad muestra que todos los grandes procesos de cambio y transformaciones vinieron precedidos de enfrentamientos, de cosas muy graves, allí están las revoluciones que marcaron la historia; sin embargo, el cambio en nuestro país, el cambio que incorpora a la mujer, el cambio que incorpora al trabajador, el cambio que incorpora la idea de la industria nacional, el cambio que incorpora el concepto de la defensa nacional, el cambio que incorpora la educación, el derecho a la jubilación, el derecho al aguinaldo, a las vacaciones pagas, los derechos de los trabajadores, el cambio que incorpora la vivienda, el cambio que incorpora la igualdad de oportunidades, se hizo en paz y en felicidad y nosotros fuimos responsables históricamente de ese cambio y de esa transformación.
Nunca accedimos al gobierno sino fue por medio de la voluntad popular expresada libremente y sin proscripciones de ninguna naturaleza; nunca fuimos el resultado de la imposición al resto de los argentinos y nunca fomentamos el rencor; al contrario, siempre tendimos la mano generosa pese a haber sido el espacio político más golpeado, más proscrito y más enconadamente perseguido que recuerde nuestra historia.
¿Y saben por qué no tenemos rencor? Porque aprendimos que la construcción colectiva necesita del esfuerzo de todos los argentinos; porque nos enseñaron que no hay nada mejor para construir nuestra propia felicidad que también el resto de la sociedad pueda ser feliz y disfrutar de la justicia, de la seguridad, del trabajo y de la dignidad. Por todas estas cosas somos también reconocidos en la historia.
Se preguntarán si no tuvimos errores. Claro que los tuvimos, claro que tuvimos errores, equivocaciones y seguramente desaciertos, pero siempre, absolutamente siempre, nuestros objetivos estuvieron vinculados con lograr una mejor calidad de vida para todos los argentinos y creo que ese lugar en la historia lo hemos ganado.
Se trata, entonces, queridas amigas, hermanas y compañeras, de seguir construyendo en esa misma dirección, en la dirección de lo colectivo sabiendo que nadie se salva individualmente; en dirección de lo popular sabiendo que lo que mejor tenemos en la Argentina es nuestro pueblo; en dirección de lo nacional sabiendo que necesitamos promover nuestra industria y nuestra producción para seguir agregando valor a nuestros productos y seguir generando más y mejores puestos de trabajo; en dirección a la educación, verdadera constructora de ciudadanos y ciudadanas.
Entonces, y para finalizar, cuando todos y cada uno de nuestros compatriotas tenga trabajo, cuando todos y cada uno de nuestros compatriotas pueda enviar a sus hijos al colegio y soñar con que ese hijo pueda llegar a la universidad, cuando todos y cada uno de nuestros compatriotas hayan accedido al derecho de tener una vivienda, cuando todos y cada uno de nuestros compatriotas tengan igualdad de oportunidades y ellos puedan elegir su vida, seguramente, nuestra misión como movimiento político, habrá cumplido su objetivo y otros nos sucederán."

jueves, 4 de junio de 2009

"Logramos un País en el que vale la pena vivir."


Cristina estuvo en Almirante Brown inaugurando una fábrica y allí dijo:

..." estoy muy contenta de estar aquí, escuchaba también por parte del señor titular de Cepas Argentina, la inteligente observación de la articulación entre lo público y lo privado, que hay que hacer épocas de crisis; el traía a colación el ejemplo del presidente Obama, en relación a la decisión del gobierno de los Estados Unidos, en General Motors, de hacerse cargo de la mayoría del paquete accionario, en la decisión de que lo importante es sostener la actividad económica, los niveles de empleo y lo que son naves insignias de un país y de una economía.
Y si se me permite en estos tiempos de cambio, de buen cambio, porque yo creo que durante mucho tiempo hubo ideas en el mundo acerca de que el mercado lo resolvía todo y que no era necesaria ningún tipo de intervención del Estado, de presencia del Estado para solucionar los problemas de los ciudadanos. Veo que vamos hacia un mundo más razonable, más armónico, un mundo donde se articulan los esfuerzos entre lo público y lo privado, y que justamente desde la primera economía del mundo, como es Estados Unidos, salen señales muy claras en este sentido.
La verdad es que cosas que veníamos sosteniendo desde hace mucho tiempo, no con el éxito que logra por allí el presidente de los Estados Unidos por obvias razones, pero lo cierto es que estas ideas las veníamos desarrollando desde hace mucho tiempo. Un mundo diferente donde pueda haber una sinergia entre lo público y lo privado; entre el Estado y el mercado, porque ambos se necesitan.
Y para terminar en un día de realizaciones, en algo que algunos de ustedes quizás piensen qué tiene que ver con la actividad económica, yo creo que un mundo diferente tiene que ver con todo; y hoy es un día histórico, la Organización de Estados Americanos (OEA), con la presencia de Hillary Clinton, la presidenta del Departamento de Estado y con instrucciones obviamente del presidente Obama, y con el consenso y por la aclamación de todos los miembros de esa organización de estados americanos, se decretó y se dejó sin efecto la sanción que tenía la hermana República de Cuba desde hace muchos años, lo cual también revela que la percepción y nuestro discurso en la 5ta Cumbre de las Américas, en Trinidad Tobago, acerca de que nuevos vientos soplan y que estamos ante una oportunidad histórica, está siendo escuchado por todos aquellos que de alguna manera conforman la decisión de este continente.
Creo que todo contribuye a conformar un mundo diferente, todo contribuye a mejorar el mundo que nos circunda. Esto de hoy que es histórico para la gente de Almirante Brown, para la provincia de Buenos Aires y para la familia Gancia porque es el corolario, el final, la expresión del esfuerzo de tantas generaciones en una fábrica que realmente es modelo y ejemplo.
Quiero felicitarlos y quiero, como siempre lo hago, cuando veo empresarios absolutamente comprometidos con su país, con su empresa, con sus trabajadores, ponerme a su disposición para lo que necesiten, como presidenta de todos los argentinos, para solucionar todos los problemas que puedan tener, lógicos en cualquier actividad, y que puedan seguir desarrollando más y mejores empresas para que más argentinos tengan mejores trabajos y mejores posibilidades de vida. Esa es la función, ustedes como el capital para invertir, producir y generar trabajo; nosotros crearles a ustedes la condiciones para poder hacerlo, y juntos empresarios y Estado, lograr que también nuestros trabajadores tengan cada vez mejores condiciones de vida, porque son - como usted recién lo decía y como yo siempre lo digo - los consumidores de todos los productos que terminan construyendo los empresarios.
Hemos entendido esta lógica del capitalismo, que es central: entender que tenemos que alentar, promover y defender el consumo, que para que haya consumo tiene que haber trabajo, y que el trabajo tiene que estar bien remunerado y con buenas condiciones laborares, y además el Estado creando salud, educación, seguridad y vivienda; cuando todo esto funciona logramos entonces construir un país en el que vale la pena vivir."

miércoles, 3 de junio de 2009

Contra y recontra.

Por Orlando Barone


Para ser y pertenecer hay que ser contra. No crítico ni justo. Ni ponderar lo bueno y lo malo, sino bien contra. Luce mejor un contra que uno a favor. El que está a favor tiene que justificarse con argumentos: el contra no tiene que justificar nada, solo oponerse. Además el contra nunca pasa por alcahuete. El que está a favor sí. Porque estar a favor de un gobierno para el contra es obsceno. Aprobar es someterse. Siempre mueve la cabeza para decir “no”. Y rechaza todo cuanto el Estado hace o proyecta- jubilaciones, créditos, obras de infraestructura, ley de medios, sostenimiento del empleo, resistencia a la crisis, etc. Parte de un desacierto para desaprobar el todo. Si el Indec está mal, la Argentina está mal. Un agujerito le sirve para disfrazarlo de colador.La de ser contra es una moda que se acentúa cuando hay un gobierno popular. Es una moda expropiadora: porque se apropia de la República, de la democracia y de las instituciones. Y hasta se apropia del himno. Y de la tribuna de doctrina y también de la ética. ¡Ah, la ética! Últimamente ha pasado a ser tan fina que solo le compete a la gente fina. Ser un contra argentino de look actual califica. Se luce sanamente comido; y más bien abrigado y bien habitado, no okupa. Lo básico del contra es estar en contra. Básicamente en contra de quienes apoyan las retenciones. Para esa parte de la sociedad ser contra es hoy una pertenencia social. Y posicionarse en un destino geográfico que se pretende privatizar con la agresión y el escrache. La geografía sojera es contra. Es un territorio ocupado. Si la contra pudiera exigiría para pasar por allí un salvoconducto agropecuario. Y todo a partir de un yuyo y de una riqueza de tómbola. Lo más extraño en la Argentina es que la izquierda-izquierda, y la vana izquierda, por ser contras coinciden con la derecha. El problema de la contra y recontra, es que están siempre en contra. Carta Abierta leída el 3 de Junio en Radio del Plata.

lunes, 1 de junio de 2009

"Mucha creatividad, mucha heterodoxia, pero un solo horizonte: cuidar el trabajo, cuidar la actividad económica, mantener el nivel de empleo."


Cristina estuvo en Comodoro Rivadavia y allí hizo un balance de estos 6 exitosos años de la Argentina. ( Cristina cuidado con Das Neves es medio traidor.)

"Quiero contarles algunos números, la presencia masiva de trabajadores sindicalmente organizados, hoy, en esta casa, son el testimonio vivo de los más de 4 millones de puestos de trabajo, que hemos creado del año 2003 a la fecha. Esas 1.200 y pico de empresas nuevas que se han creado, aquí en Comodoro, son parte de las 20 mil empresas, que por año se han creado, desde el año 2003 a la fecha.
Déjenme decirles, también, que de esa participación en el Producto Bruto Interno, que los trabajadores tenían, en el año 2003 y que era del 33, 34 por ciento, hoy, aquí durante el año 2008, hemos llegado al 43,6 por ciento, gracias a los 1,500 convenios colectivos de trabajo que han negociado los sindicatos argentinos.
Déjenme contarles, también, que de aquella deuda externa, que significaba más de 150 por ciento del PBI y de la sujeción al Fondo Monetario Internacional, hoy, después de una política donde se ha vuelto a recuperar el sistema de decisión nacional ese porcentaje de la deuda no llega al 50 por ciento y ya no viene el Fondo Monetario a dictarnos lo que tenemos que hacer, en la República Argentina.

Déjenme, también, contarles que en estos años, nuestros jubilados no solamente habían visto congelados, durante décadas, sus beneficios previsionales; ahora han tenido más de 13 aumentos y además hemos incorporado a casi 2 millones de argentinos y argentinas que habían perdido el derecho a la jubilación o a la pensión.
Déjenme contarles, también, que en estos seis años hemos construido casi 700 escuelas; déjenme contarles también que hemos construido más de 250 mil viviendas y ahora hemos recuperado al Banco Hipotecario como el instrumento tendiente a poner de nuevo en marcha el sueño de la casa propia, para aquellos sectores que tienen un poder adquisitivo que los dejaba fuera de los planes sociales.
Déjenme contarles que estamos desarrollando el plan energético más importante del que se tenga memoria, no solamente diversificando la matriz energética, reiniciando una obra paralizada desde el año 1994, como la central Atucha II, sino también conectando por primera vez al país. Nosotros, los hermanos y hermanas de la patagonia sur, somos el testimonio vivido; el sistema interconectado llegaba únicamente hasta Choele.Choel, Río Negro; fue este Gobierno y este plan energético el que extendió la línea, primero, hasta Puerto Madryn y ahora desde Puerto Madryn hasta Pico Truncado. Y hoy, en Río Gallegos anunciábamos la licitación para ir hasta Esperanza, Calafate, Río Gallegos y Río Turbio.
Hace unos días, en otra región hermana, Cuyo poníamos en marcha la obra que va a conectar por primera vez el Comahue y Cuyo, poniendo en marcha también todo el proceso para construir la línea de alta tensión NEA-NOA inaugurando, el otro día, la primera línea de alta tensión en La Rioja. Nunca en la historia, y es cierto, uno tiene que escuchar muchas veces que mientras nosotros estamos haciendo estas cosas - haciendo, se entiende el verbo ¿no? hacer, trabajar
Y déjenme contarles que este proyecto nacional que desde el año 2003 gurúes y economistas nacionales y también de afuera, por qué no, venían preanunciando que finalmente era un veranito que se iba a extinguir, aquí estamos.
El año pasado, 2008, fue el año de las mayores exportaciones en toda la historia de la República Argentina, más de 71 mil millones de dólares, del mayor superávit comercial, y este año, con el mundo que se ha caído, con el mundo que se ha desplomado, que ha generado desempleo, destrucción de economía, déficit fenomenales en los principales Estados del mundo, aquí está la Argentina manteniendo con fuerza la actividad económica, no permitiendo que nuestros trabajadores se queden sin trabajo y hoy anunciando la recaudación fiscal más importante también de la historia: 27.291 millones de pesos, 12,6 por ciento más que el año pasado, también con un mayor superávit comercial que el del año pasado porque tenemos una política de intervención del Estado en materia comercial de la misma manera que hemos convertido en objetivo primordial de la etapa mantener la actividad económica y la vinculación laboral de nuestros trabajadores.
Siempre lo digo, puede haber un turno que esté suspendido; puede haber alguien que esté cobrando a lo mejor el 80 y pico por ciento de lo que es el salario, pero lo que tenemos que lograr es que ningún trabajador quede desvinculado porque cuando llega el telegrama de despido, se acaba la dignidad, se acaba la posibilidad de vida en el hogar donde llega.
Por eso, mucha creatividad, mucha heterodoxia, pero un solo horizonte: cuidar el trabajo, cuidar la actividad económica, mantener el nivel de empleo. Esos deben ser los ejes.
¿Y saben por qué? No solamente por una cuestión de convicciones históricas y políticas o por una cuestión de sensibilidad, sino que tiene que ver con el resultado concreto de este modelo. Porque si nosotros hemos podido soportar en forma mejor y diferente que otros países esta crisis global, ha sido precisamente por tener un robusto y sólido mercado interno que nos ha permitido sortear el estrangulamiento en el sector externo.
Cuidar entonces este mercado interno cuando muchos aconsejaban -bueno es recordarlo también allá por el año 2007 o 2008- que había que enfriar la economía porque se había recalentado, como si fuera posible tener un switch o una perilla con la cual uno pudiera manejar la graduación. No se daban cuenta que enfriar la economía significaba gente con desempleo y hubiera significado una crisis catastrófica de haber aceptado esas teorías.
Pero, por suerte, siempre hemos creído en nuestras propias fuerzas, que es la fuerza de los argentinos; siempre hemos creído en nuestro país; siempre hemos creído que el trabajo, la producción y el valor agregado a nuestras materias primas, a nuestros recursos es la clave para seguir creciendo.
Por eso sé que este es el lenguaje, el lenguaje de los hechos, el de las realizaciones y el de los resultados. Porque, finalmente, si tuviera que elegir lo que tal vez sea lo más sobresaliente de estos seis años, es que aquellas ideas que muchas veces desde una banca manifestábamos como oposición interna, primero, durante la década de los '90 o, luego, cuando los que vinieron a cambiar todo no solamente no cambiaron nada sino que empeoraron todo, pudimos demostrar que no eran ideas de ocasión, que no era retórica para ocupar un centimetraje de diario o dos minutos de televisión, eso dura muy poco, la lectura de dos minutos o el oído durante cuatro. Después deben estar los resultados y la posibilidad de llevar esas ideas y esos proyectos a la práctica.
Entonces, quiero rescatar de estos seis años lo que hablábamos de un modelo de país diferente, un modelo que hiciera hincapié en el trabajo y en la producción, en el mercado interno, en volver a ser un país independiente, pero no porque estemos aislados del mundo, al contrario, independiente porque ser capaces de tomar nuestras propias decisiones era posible. Nos decían que no se podía hacer, que no había vida más allá del Fondo, que nada era posible, que todo era imposible y aquí estamos.
Por eso, en esto seis años del crecimiento económico más importante que recuerde la historia de nuestro país en sus 200 años, quiero decirles, argentinos y argentinas, que estos resultados no son de un sector ni de un partido ni de un gobierno, son de ustedes, de todos los argentinos, de todos, de los que nos quieren y de los que no nos quieren, de los que nos votan y de los que no nos votan, porque queremos una Argentina para todos. Así nos enseñaron, así aprendimos, así lo queremos y así lo vamos a seguir haciendo.